La vida...

"La Historia es un motor...un motor que engrana la crítica, la voluntad de poder y la existencia humana."

jueves, 26 de mayo de 2011

Dios en el Renacimiento

Dicen que no comprendo tu
existencia, que el fuego de los
réprobos me quema; y que mi lengua
sin cesar blasfema, y que no entiendo
la palabra Dios.

Dicen que no te busco ni te imploro,
ni tus grandezas infinitas veo;
dicen que tengo el corazón de ateo,
y que mi labio te maldice, ¡No!
El Universo es el augusto Templo
donde te encuentra absorta la mirada,
el sol es una lámpara colgada
que derrama su luz sobre tu altar.
Allí te adoro yo, porque tu nombre
entre los astros fulgurantes brilla
y en espíritu doblo la rodilla
adorando en silencio tu bondad.
El aire que la atmósfera embalsama,
la savia que los seres acrecienta,
y el fuego que los mundos alimenta,
Tu excelso nombre proclamando
están.

Eres la voluntad inquebrantable,
el Bien Eterno, la Virtud Potente;
de la Verdad inagotable fuente,
porque eres la Razón Universal.
En su mezquina estupidez el hombre
se forja un Dios indigno de alabanza,
ebrio de odio, cólera y venganza,
terrible y sanguinario como él.
Jerónimo Savonarola
Otras veces se finge, en su locura
un Dios afeminado que se esconde,
que a la voz del creyente no
responde, si en su altar no hay
encajes ni oropel.
¡Eso no es Dios! El Dios en quien yo
creo tener no puede el interés del
oro;
el Dios Verdad, el Dios a quien yo
adoro, no cambia sus bondades por
metal.

Su Espíritu Gigante no se oculta
en el recinto estrecho de un sagrario;
el Universo entero es su Santuario;
porque es la Providencia Universal.
Interna Voz, Inagotable Fuente,
Fecunda Luz, Vivificante Esencia,
la base de tu Templo es la Conciencia,
y tu Gran Sacerdote, es el Amor,

Yo sé que existes, Inmutable, Grande;
yo en tus bondades infinitas creo,
porque en la tierra y en los cielos veo
resplandecer esta palabra, ¡Dios!

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Recuerda que el respeto es básico en la relación entre los hombres.